jueves, 22 de mayo de 2014

Never never never



https://www.youtube.com/watch?v=JUOSEM82gTU

<<- i=""> Entonces, ¿no quieres verme?
- Una parte de mí dice sí, pero la otra no...
-A la que dice no, mátala.
- ...tú eres el asesino.
- ¿Qué parte dice no? Habla con ella, ¿es el alma? ¿el cerebro? ¿es el corazón?
- Es el cerebro, que es más listo
- El cerebro... Tengo que darle un beso al cerebro entonces ¿sabes?>>

...

viernes, 3 de enero de 2014

Un bacio nel cervello


¿Sabes qué es lo peor de todo? Que no me arrepiento. Y que si hoy pudiese tener la oportunidad de repetir un momento en mi vida sería aquel en el que las nuestras se cruzaron. Conocerte del mismo modo, con la misma gente, en el mismo lugar, con las mismas estupideces. Quisiera tener la misma suerte de conocerte y ser tan estúpida de volver a… a… ya sabes…   

No sé qué diablos has hecho ni cómo lo has conseguido, pero desde luego que si la felicidad existiese, tendría que ser algo muy parecido a aquello. Pueden que sean tus besos en el cerebro, la distancia o la impotencia, pero hay algo que hace que te odie y que quiera olvidar cada palabra que me dijiste en ese idioma que tú y yo inventamos. Tienes que decirme que  esto no terminará como una historia más...

A veces me pregunto si lo nuestro será como una de esas películas en las que los protagonistas se tienen que separar y al cabo de mucho tiempo volver a reencontrarse, como por arte de magia, un día cualquiera, en una panadería perdida en cualquier esquina del mundo. A veces me pregunto si aprenderé a vivir sin ese sueño. A veces me pregunto si existe el destino y si mi destino eres tú.


Mientras tanto, aquí ando, intentando contarte nuestra historia en lo que dura una canción. Pero no puedo. Me faltan palabras y me sobran lágrimas. 


domingo, 19 de mayo de 2013

Dudas infinitas




         Mientras tú examinas mis defectos, yo sigo dando vueltas en la cama, alargando el tiempo, alargando un triste domingo más, esperando a que llegue otro lunes, un día más.

         Busco una canción, algo que me separe de la realidad. 5ª Sinfonía de Beethoven, en Do menor. ¿O era mayor? Qué más da... si yo nunca entendí de música.

         Que si sí. Que si no. Que si qué más da, lo importante se nos va. Si jugamos a no arriesgar, si saboreamos lo que podría ser libertad.  Y Me tiembla la mirada. Y te repito una vez más, que yo a este juego no se jugar.Yo... solo quiero que me acuesten tus buenas noches.


domingo, 30 de diciembre de 2012

2013


Con el fin de año llegan de nuevo las famosas listas de deseos para el próximo año. Como no podía ser menos yo ya tengo la mía.
Este año trae novedades, he pasado de apuntar lo típico de ir al gimnasio y perder esos kilitos de más. Este año me he centrado en cosas más importantes. Cosas  que realmente me llenan. Locuras pero no estupideces. 
- El primero de mis propósitos es volver a darme una oportunidad a mí misma y volver a creer en mí. Quiero volver a disfrutar de pequeños momentos, esos que dicen que la vida regala. Quiero sentir que estoy viva.
- No voy a preocuparme por el tiempo, lo que sea llegará. 
- Voy a seguir equivocándome porque he comprobado que así es como más aprendo. 
- Voy a intentar, y recalco intentar, decir <<te quiero>> más a menudo.
- Cuando esté triste porque algo sea difícil voy a pensar en Ángela, Bea, Antonio, Álvaro, Elena, Juan Jesús... ellos me ayudaran a seguir. Lo voy a hacer por ellos.
- Este año no me voy a cansar de hacer proyectos nuevos y continuar los que ya llevo.  
- Voy a proponerme soñar porque hace demasiado tiempo que simplemente duermo.

Estos son sólo unos pocos. La lista de deseos es innumerable, pero tengo tiempo para cumplirlos...



domingo, 28 de octubre de 2012

Entre comas.


Joder, que patético. Ves como se van uno a uno los coches del parking mientras te acabas el sandwich.
Mejor dicho, que patético es tener que comer sola, dentro de un coche, porque te de vergüenza hacerlo fuera. 

Te sientes como... vacía... Sí, eso es, vacía, como si entraras en un abismo tenue, sin paredes, con sólo una dirección, que te arrastra a lo más profundo, donde se encuentran las cosas que antes no podías ver.

Acaba de llegar un hombre. Ha aparcado unos metros más allá. Ha salido con una bolsa de plástico y se ha ido a un banco cercano. Parece que ya tiene experiencia en esto. Saca su tupper, desenvuelve su tenedor y con el mismo pañuelo con el que estaba envuelto éste, se coloca una especie de babero para no manchar su corbata tan maravillosa. Ya están listos, él y su petaca. 

Maldita radio... que oportuna eres a veces... Justo ahora, cuando empiezas a ver tu reflejo en ese extraño hombre, comienza a sonar Patience, de Take That. ¿Señal? Quién sabe...

Te preguntas si estaría bien invitarle a comer juntos. Cada uno en una parte del banco, eso sí, todavía no estas lo suficientemente loca como para comer junto a un desconocido. 

Entre pensamiento y pensamiento el tipo acaba su almuerzo y se va sin dejar huella. Así que ale, sécate las lagrimas, vuelve a maquillarte y vuelve a fingir que eres dura como un roble y que no te importa comer sola. Dentro de unos años tú también tendrás una corbata maravillosa.

viernes, 13 de julio de 2012

20

*Pi Pi Pi*
Ha terminado el minuto, el microondas salta, la leche ya está caliente, al igual que las tostadas.
No ha cambiado nada, hoy también desayuno un vaso de leche con Cola-Cao calentito.
Una a una van llegando postales vacías, envueltas en un simple felicidades con remitente en la esquina, esperando emocionar y/o a veces ni eso.
Entre la multitud sólo esperaré una. Una cargada de ilusión, una que todavía nadie ha podido escribir. Y esperaré y esperaré hasta darme cuenta de que mis sueños son imposibles, hasta darme cuenta de que no estoy tocando el suelo y caeré de golpe. Hasta ser consciente de que tengo un año más, entre otras cosas, de madurez. Que ya está bien de soñar con pajaritos, que es hora de ser algo más.

sábado, 30 de junio de 2012

Cambiemos de meridiano



Por casualidad hace dos años cambié un futuro predestinado y crucé al otro lado del meridiano. Aparentemente fracasé, no giré los suficientes grados y me quedé a medio camino. 
Así que, por casualidad, conocí a gente maravillosa en el camino. Gente indescriptible que me han llenado de amor. Todos me han ido recomponiendo. Todos me han dado algo, cosas que jamás seré capaz de devolver porque por casualidad soy así.


Ellos han roto mi rutina diaria, han hecho que cada día fuese especial, sin merecerlo. No me han dejado tener un mal día. Han sabido escucharme sin que necesitara hablar. 
La noche del puerto contando historias estrelladas, las madrugadas en el coche calentitos, las risas en los baños, las horas muertas entre clase y clase, los almuerzos exprés, las colas del microondas, la adrenalina escondiendo tartas, las largas horas de trabajos, las noches antes de los exámenes,  el diccionario, las sesiones de cine, las prácticas, las salidas, las entradas…  En fin, dos años de recuerdos para llenar libros.


Y ahora que llega el verano, el que tanto deseábamos, tenemos que separarnos de nuevo. Será difícil, no lo niego, pero a la vuelta (que casualidad) nos quedarán otros dos años más por rellenar.
Y sí, miento si digo que todo esto es casualidad… esto es más bien un diseño cuasiexperimental. Gracias T.O.